Visitas Inesperadas

-Al amanecer del dia siguiente la pareja de viajeros llegaba a destino. Deteniendo la joven el caballo al tirar de las riendas de este. Con una sonrisa en los labios al bajar rapidamente de este. Acomodando el gorro de piel que trae sobre sus cabellos. Al momento de avanzar sujetando su arco en la mano derecha. Deteniendose frente a una pequeña loma y viendo el imponente castillo frente a ellos. Mientras de sus labios escapan suavemente una suave melodia en la forma de una pequeña fraccion de una cancion que conocia de hace ya mucho tiempo-

All glory, all honor
Victory is upon us
Our savior, fight evil
Send armies to defend us
Europa, Europa
Find better days before us
In kindness, in spirit
Lead us to a greater calling

Bajó del caballo y retiró de la montura un lazo para atarlo en la rama de un árbol, cómoda sombra donde podría pasatar cómodame hasta su regreso, el cual deseaba que fuera con todas sus extremidades colocadas. Conocía los antecedentes de los Skykeeper, que aunque fuesen aclamados por su bondad, también eran fuertes y un humano como él, quizás no saldría vivo. Sin esperar la autorización de la muchacha, avanzó hacia el castillo a paso firme, ajustándose el abrigo ante el frío matutino y por instinto, se acomodó los largos cabellos negros a manera de márgen en su rostro, todavía tenía indicios de su gala.

- ¿Con qué pretexto se supone que entraremos?

-Comenzaba a seguirle por el sendero que los lleva hacia las puertas del lugar. Deteniendose frente a las enormes puertas antes de comentar a su acompañante- Se ve que tienen renombre para una construccion de esta magnitud. Sabes cuanta gente vive aqui? -Preguntaria posando la palma de la mano derecha sobre la puerta para empujar lentamente esta en busca de poder abrirla. Esperando que no estuviera cerrado e inpidiera su entrada al recinto-

Un golpecito a manera de coscorrón dió lugar en la cabeza de la muchacha, el Conde ya no era más un delicado señor de altas tierras, se comportaba como un muchacho liberal, digno de la época futurista. Los labios se le curvaron en una mueca de molestia y se acercó para murmurarle.

- Van a molestarse si entramos de esta forma .. Tengo una idea. Busca una ventana dónde colarte y yo entretendré desde la puerta. Voy a distraerlos.

Con esas palabras mencionadas, golpeó la puerta con los nudillos en un suave llamado.

Es un muro exterior. No hay ventanas. Lo mejor sera tocar. -La joven acomoda su sombrero de piel antes de tocar aquella puerta de manera un poco insistente y algo fuerte para que se pueda escuchar con claridad del otro lado. Y que alguien viniera a abrirles en ese momento pues esperar ya se le estaba haciendo tedioso y comenzaba a fastidiarla

Su rostro quedó unánime en los segundos que perduró su shock .. ¿Acaso .. Acaso eso era una quimera? .. Quedó completamente pálido al pensar en los experimentos realizados en aquella inocente muchacha, además de que estaba tentado a ver los archivos de estos. Fue la voz de la chica lo que le sacó de sus pensamientos, haciéndole ponerse derecho y mostrar la cordialidad y comportamiento necesarios para hacer gala a una familia importante.. Aunque no sabía si ella pertenecía a tal.

- Buen día, señorita. Me conocen como el Conde de Northerland. Estamos aquí para discutir un .. tema con algún integrante de los Skykeeper. ¿Se encuentra uno en casa?

-La joven rapidamente haria una ligera reverencia ante la joven que les habia abierto la puerta. Notando con su sentido de olfato como la esencia de aquella joven mas alla de esas orejas extrañamente tenia un verdadero olor a conejo. Algo que la hizo preguntarse a que se debia algo asi. Mas de momento solo se levanto de su reverencia permaneciendo al lado del Conde. Dejando que el fuera quien hablara y ella quedara como su acompañante o algun tipo de sirviente-

Agradeció al inclinar la cabeza y entró con un poco más de confianza hacia la estancia, indudablemente hermosa.. Los jardines le cautivaban en demasía y la armonía del sitio le relajaba, podría pasar ahí toda su vida. Primero le cedió el asiento a Alexia, retrocediendo la silla para que esta se acomodara, después tomó una propia frente a la mesa, cuyos detalles observó mientras hablaba, sin inmutarse por la confianza de la muchacha.

- Hm. Estamos en busca de un manuscrito, escrito por Evan Hart. Habla de un conjunto de pasos de baile en ballet.

Sólo pudo mencionar aquello, no estaba dispuesto a mencionar sus verdaderas intenciones, no a cualquiera.

-Tomaba asiento tranquilamente reposando su vista en aquel jardin. Observando la paz y la calma del lugar, respirando lenta y profundamente el aroma de las rosas desde donde se encontraba. Mas luego sus oidos se agudizaban concentrandose en la joven frente a ambos. Gracias a su superior sentido auditivo facilmente podia percibir cuando la frecuencia de su voz o su agudes cambiaba. Claros indicadores de cuando alguien oculta o miente sobre algo. Asi como poder olfatear la mas minima esencia de nerviosismo de presentarse en aquella joven-

La mirada que intercambiaron las damas no pareció agradarle, había desconfianza en ese momento y lo menos que ansiaba era algo que estropeara sus intenciones, necesitaba cambiar el tema de inmediato. Levantó las manos hasta la mesa para entreenlazar sus dedos y con una sonrisa jovial, continuó en el testimonio de sus memorias, lo poco que sabía de ese inquietante y pequeño libro.

- Los rumores hablan de un hombre loco, un hombre sin aparente intención para escribir lo que esos papeles relatan, un baile. No obstante, dichos pasos fueron clausurados en algun sitio .. Pensaba que quizás, aquí. Está algo gastado y la portada tiene dibujada con óleo zapatillas de ballet en rojo.

.Permanecia aun en silencio sin decir palabra alguna. Mostrando una suave y ligera sonrisa al ver la reaccion de aquella joven ante su mirada. Se le habia hecho un poco divertido el haberla inquietado de esa forma. Girando el rostro para observar al Conde al momento en que habla de aquel libro que buscan-

Se recargó contra la silla soltando un suspiro y a la par, sus ojos se cerraron para meditar unos breves segundos, sabía que no iba a ser tan fácil. Sus dedos entreenlazados se movieron al ritmo de un tic tac durante la búsqueda en su mente, debía haber algo que pudiese ofrecerle a la dama a cambio para que pudiese prestarle ayuda, de eso dependía un eterno experimento que no estaba dispuesto a dejar.

- .. Póngale el precio que desee, el oro que se le antoje .. Ó, si no le interesa el dinero .. ¿Qué le parece obtener el "Ojo de la victoria"?

Dentro de su mente se maldijo por soltar tal tontería, no había manera en que un humano pudiese obtener el ojo de la victoria, si los rumores eran ciertos, lamentablemente cumplía sus promesas y si la muchacha accedía, tendría mucho por hacer.

-Notando la ligera alteracion del Conde al hablar de dicho objeto se sentiria intrigada. Fijaba la vista en aquella joven que les habia recibido. Preparandose a hablarle por primera ves luego de conocerla en persona. Mas esperaba a ver su reaccion ante el comentario del Conde para hablar-

Sonrió, había dado en el blanco. Se acercó un poco para enfatisar su seguridad y le sonrió como un hombre victorioso, pero servicial.

- Por supuesto, puedo obtenerlo .. Soy un hombre de negocios y sin duda, sé dónde se encuentra. Si usted me asegura que tiene los escritos, yo le traeré el ojo.

Si usted le da lo que el Conde desea. El le podra traer lo que desea. Por otro lado. Si la señorita acepta. Podemos empezar con la caceria -Diria con una ligera emocion en su voz al volver a pensar en la meta que se ha propuesto-

Eso resuelve el asunto por completo -Comentaba con una sonrisa de satisfaccion antes de ponerse de pie de su asiento. Avanzando a un lado del Conde. A su derecha exactamente esperando que el se levantara- Ahora podemos continuar

Se levantó silenciosamente cuando obtuvo la aprovación de la dama, indicándole con un discreto ademán a Alexia para que le siguiera hacia la puerta, sin darle la espalda a la muchacha.

- Entonces, se lo traeremos cuanto antes. Vamos, Alexia.

Notó el interés de esta por continuar la cacería, y él estaba sumamente desesperado por el libro, así que no iba a desperdiciar ni un segundo más.

Buscamos cazar un dragon. Probablemente le suene muy extraño o loco. Pero asi es -Responderia antes de avanzar al lado de aquel Conde. esperando su reaccion ante aquella pregunta que hacia la joven. Y ante la respuesta que le habia dado-