Paseo Inesperado

Cuando la muchacha llegó se pudo haber dado cuenta que encima de una gran roca tosca que antes pudo haber sido una banca de piedra, había una persona encapuchada, cuyo grosor de torso delataba que era un varón, el tal "Elías" que le había invitado a su venta privada de información. Sin levantar la vista y permitiendo que su rostro fuese invadido por sombras, murmuró con burla.

- ¿Cuánto está dispuesta a pagar.. Skykeeper .. ?

El hombre era un ser extraño, pues no sólo se sentaba como rebelde de la época futura, si no que tenía entre sus dedos un llavero de conejito junto con un extraño objeto que si la dama hubiese vivido en el futuro, sabría que es un celular celeste completamente destrozado.

El hombre de cabello azulado y ojos aqua levantó la vista para ver a la muchacha, jamás había visto esa moda en esa época, pero le fascinaba.

- .. ¿Usted cómo cree que es el futuro?

- ¿Y si le dijera que no tiene que esperar? ¿Que el futuro ha venido personalmente a este presente?

Sonrió a medio labio con tales palabras, pues él era uno de los seres que había llegado del futuro, sus jeans gastados y su chaqueta de cuero color caoba debajo de la capa lo delataban, pero ¿Bajo qué condiciones habrá llegado? Aunque su intención era colocar otra ración del futuro en manos de la dama.

- Ahora nos entendemos, señorita.

Sonrió el caballero y se puso de pie, avanzando hasta ella para quedar a un metro y medio de distancia, la mirada que le dedicó era confiada, y aunque él podría ser un bicho raro para ella por las ropas que llevaba, parecía sentirse más de lo que era.

- Le daré la ubicación de los visitantes del futuro, a cambio, pido que invierta medio millón de oros en provisiones para esas personas, pues son demasiadas. ¿Acepta mi trueque?

Tomó la mano de la dama sin molestarse en quitarse las guantaletas gastadas de cuero negro en sus manos, después señaló con un dedo hacia el bosque, sitio que ella debía conocer excelentemente.

- Es un misterioso edificio que desentona con la arquitectura de la ciudad, está pasando las zonas de las Banshee. Confío en su palabra, señorita.

Sonrió a la muchacha, caminando a lado de ella para pasarlo de largo. Después de unos segundos sus pisadas ya no existían, había desaparecido por completo.


---

Al siguiente post cierre el tema, señorita Amelia.

Asi sera

Susurraba suavemente antes de avanzar hacia su montura, cabalgando su corcel rumbo a su castillo, para reunir el pedido que le hicieron en dinero y traer algo extra que ya habia pensado desde el momento en que supo de los hechos. Y el enorme peligro en el que se encontraban al estar cerca del bosque de las Banshees


Tema Cerrado