¿Dónde demonios estamos? - Continuación.

-...!-Sintiendo un leve dolor en la mejilla la tocó, mirando los restos de sangre que había quedado. Se sintió mareada y que la presión sanguínea le había bajado, ver sangre no le hacía bien ni aunque fuese un poco. Apoyándose como podía en Vinushka tomó aire varias veces.

Se maldijo a sí misma y al sujeto que la había hecho que mostrara debilidad de esa manera, gruñó y cuando no se sintió lo suficientemente mal gritó:

-¡GRACIAS POR DECIR ALGO ÚTIL! ¡CABRÓN!-

Luego cayó en la cuenta de lo que había dicho. ¿Inglaterra? ¿1800? ¿Qué carajos?

Miró alrededor y sabiendo que estaba en territorio desconocido, la idea no le gustaba para nada.

Tomó a Vinushka en brazos para serle más fácil la caminata y avanzó en grandes zancadas entre la vegetación.

Necesitaba verlo claramente para comprobarlo, recordaba la dirección del centro de la ciudad en su época y con eso dedujo que podría haber algo importante allí, puesto a que se construían (o según había aprendido) ciudades sobre lugares importantes; había oído que en Sudamérica habían lugares llamados "Fortines" y en ellos habían construído ciudades.

Por ende, dedujo que el centro de la ciudad en la época de la que venían sería un lugar importante en esta época.

Así comenzó a correr, deseando que esas palabras fueran verdad.


{Salgo del post, sigo en el Mercado}

Olothontor escribió:

**El joven Dragón mira a la niña con cierto desprecio. Usando una pizca de su poder elemental, controla el viento de la zona y hace, que una pequeña y estrecha ráfaga roce la mejilla de la humana, dicho viento lleva tal velocidad que hace un leve corte en la mejilla de ella, pero para los sentido inferiores de una simple humana lo único que podría razonar es que el músico, con solo mirarla, le causo esa leve herida, ya el viento fue movilizado de tal manera para que ella no sintiese la ráfaga.

--No abuses de tu suerte, pequeña…--

Le menciona, en un tono, que hace ver la orden de la joven, como una petición amable. Luego comienza a adentrarse más en el bosque, en la misma dirección por la que vino, comienza a elevar su flauta y a colocarla en posición para tocar, pero antes, expresa una última oración.

--Están en Inglaterra, el año es el 1800 aproximadamente… Si algún día quieres volver a verme, solo canta.--

Y comienza a tocar en su flauta, lo a él le gustaba llamar “la melodía de los vientos” y junto con ella, lentamente, desaparece en las sombras de los árboles.**

[Salgo de Escena. Tema - Preparando la Cacería]